Las carreras de Escorpio, de Maggie Stiefvater

Hola!¿Qué tal estáis? Hoy traigo la reseña de un libro que me ha gustado, pero no tanto como creía que fuera a hacerlo. Ahí va:

Título: Las carreras de Escorpio

Título original: The Scorpio races

Autora: Maggie Stiefvater

Editorial: Destino

Páginas: 399

Precio: 17,95€

Edición: Tapa dura, sobrecubiertas (mi edición incluye faja), papel de muy buen gramaje.

Lo primero es decir unas palabras sobre lo que entra por los ojos: La edición. Desde aquí mando mi felicitación al equipo de Destino porque se lo han currado, sí señor. La edición es preciosísima. El papel que han usado es blanco (nada de reciclado), de un grosor muy bueno. Además es super suave *_* Merece la pena pagar los 18 euros, la edición lo vale.

Sinopsis (Propia) sin spoilers: Cada año, en noviembre, en la isla de Thisby se celebran las llamadas Carreras de Escorpio. En ellas, los jinetes deben dominar a sus capall uisce, caballos de agua, y llegar a la meta. La mayoría mueren en el intento. Y es que los capall uisce son unas bestias sacadas del mar, que, en contacto con él, enloquecen, llegando a devorar cualquier cosa que se mueva. Su propio jinete, el caballo de al lado, lo que sea. Son sanguinarios, carnívoros, muy peligrosos. La mayoría de jinetes compiten por la suculenta recompensa, aun a sabiendas de que se pueden dejar ahí la vida. Es el caso de Puck Connolly. Es la mediana de tres hermanos que quedaron huérfanos hace un tiempo. Cuando Gabe, el mayor, anuncia su marcha de la isla, y al mismo tiempo llega la noticia de que deben abandonar su casa por falta de pago, Puck decide hacer lo que sea por conservar su hogar y a su familia unida. Incluso poner su vida en peligro en las carreras de Escorpio. Por otro lado tenemos a Sean Kendrick, experimentado jinete y domador de capall uisce. Ha ganado la carrera en varias ocasiones, y este año se le presenta la oportunidad de ser libre por fin, de que su montura Corr, con quien le une un estrecho y especial lazo, pase a ser de su propiedad, de conseguir su sueño. Ambos deben ganar. Cuando Puck empieza a entrenar a su yegua, conoce a Sean, quien se convertirá en su mejor ayuda y amigo. Sin embargo, la tarea no es solo salir con vida de la carrera: ambos necesitan llegar en primer lugar o lo perderán todo.

Comentarios y opinión personal: Tras leer la saga Temblor y disfrutar como una enana con ella, este libro tenía que ser mío, el argumento pintaba muy interesante. El estilo de la autora no ha cambiado, sigue siendo igual de bonito que en su anterior saga. La novela no se hace para nada aburrida, sin embargo, quizás un poco pesada. El motivo es que, desde que Puck se apunta a la carrera, hasta que llega la carrera en sí, pasa casi todo el libro, pero apenas suceden hechos importantes. Se mantiene un poco la tensión, ya que Puck, al ser la primera mujer de la historia en apuntarse, y para colmo, con una simple yegua, se crea muchos enemigos. Debe andarse siempre con mil ojos para que nadie les haga daño a ella o a Dove, su querida yegua. la autora nos pone de manifiesto un machismo injusto, supongo que es una manera de denunciar ciertas injusticias que desgraciadamente hoy en día también existen. Por otro lado, Sean es el favorito, pero también tiene un enemigo, que es Mutt, el hijo de su jefe. Mutt se la tiene jurada por pura envidia. Sabe que Sean monta el mejor capall uisce, Corr, mientras que su padre solamente le permite a él montar en un capall uisce seguro. Envidia la capacidad de Sean para dominar los capail uisce, su habilidad, su talento, la gloria que se lleva el vencedor, que quisiera para sí mismo. Maggie nos ha pintado un malvado que se mueve por pura envidia, por celos. Muy típico, pero no por ello menos interesante. Con Corr, Sean tiene un lazo muy especial. Prácticamente son parte el uno del otro. La autora ha sabido definir muy bien ese lazo, de manera que comprendemos por qué Sean no puede dejar la isla, no puede abandonar a Corr, necesita que sea de su propiedad. Los hermanos de Puck están muy bien, al no ser personajes principales aparecen lo justo y necesario. Finn, el pequeño, es un encanto, y Gabe, el mayor, tiene sueños y ambiciones que también entenderemos. El resto de gente de la isla salen poco, hay bastantes nombres pero no es necesario memorizarlos todos, lo que es de agradecer. 

Tanto en personajes, como en estilo, como en descripción y diálogos, el libro está muy bien. El punto flojo es que se nos hace un poco pesado hasta que por fin llega la competición, y vemos demasiado a Puck y a Sean comerse el coco. Porque la novela está narrada a dos voces, alternándose, y peca de tener demasiados capítulos con los protagonistas pensando en lugar de actuando. El tema romántico queda muy, muy en segundo plano. Estaba claro que esos dos iban a tener algo, pero no lo dejan ver hasta casi antes de la carrera. Y solamente un par de besos. Sabemos que Puck es muy independiente y que no está en sus planes tener otra atadura más, con cuidar de sus hermanos tiene suficiente, pero me extrañaba que Sean nunca pensara en ella como una posible compañera. De hecho, toda la isla piensa igual que yo, se lo dicen a ambos, pero como si no lo oyeran. Hay amor entre ambos, pero no es el tema principal del libro por lo que apenas se toca. No me gusta eso >.<

Otra cosa a mencionar es que se nota que a la autora le encantan los caballos. El libro está lleno de amor hacia ellos. Maggie los conoce bien, y se refleja en cada página del libro. En la sobrecubierta dicen que se especializó en pintura ecuestre, lo que es una señal de que le gustan mucho.

Lo que sí me ha gustado es el final. El final es simplemente PER-FEC-TO. Era un gran dilema ya que ambos merecían ganar, ambos tenían una causa muy noble por la que luchar. Sin embargo sabemos que solamente uno podría hacerlo. Y la autora consigue ese final adecuado y justo para todos los personajes. No podía tener mejor final, en serio.

Al final del libro hay una nota de la autora en la que explica el mito de los caballos y lo que le llevó a escribir este libro. Además también asegura que no va a volver a escribir sobre él, es decir, que este libro es autoconclusivo, se queda como está. Me alegra que sea así, además que no hay mucho más que contar, pero un pequeño epílogo sobre lo que pasó con los protagonistas, hubiera estado más que bien.

En definitiva: Un libro bien narrado y muy interesante, con unos protagonistas carismáticos y de fondo una carrera de lo más interesante. Le faltan cosas por el medio, pero tiene el mejor final que podría darsele. Maggie ha vuelto a coger un animal mítico y le ha dado su propia visión a la leyenda, como resultado tenemos Las carreras de Escorpio. Si te gustan los caballos, no te lo puedes perder.

Nota final: 7/10

Próxima reseña: Las tejedoras de destinos, de Gennifer Albin