jueves, 16 de mayo de 2019

Mi mundo en tus ojos, de Abril Camino

¡Hola, bellotitas! ¿Cómo estáis? Hoy vengo con la reseña de un libro que pasó desapercibido para mí cuando salió, pero que un año después he leído y ¡me ha encantado!


No conocía a esta autora, Abril Camino. El año pasado el lanzamiento de este libro quedó para mí eclipsado porque Titania lanzó otros casi al mismo tiempo y no pude dedicarle mis atenciones -porque se las dediqué a los otros, jajaja-, pero decidí darle una oportunidad y vaya si ha merecido la pena. 

Si conocéis las historias de Brittainy C.Cherry y os gustan, os gustará esta. Porque no tiene nada que envidiarle, está muy bien escrita, la narración es casi poética y los sentimientos están descritos de manera magistral. Trata de dos personas rotas que se encuentran la una a la otra y luego se encontraran a sí mismas y pegaran sus pedacitos. Sí, lo habéis adivinado: drama, drama, drama. Mucho drama. Pero no drama gratuito, drama del que merece la pena leer, del que suspiras a cada página y sufres y sientes lo mismo que los personajes (así de bien escrito está). 

Summer y Logan son los protagonistas. Ella fue secuestrada cuando era una niña de cinco años y estuvo varios meses en cautiverio en un sótano junto con otros pobrecitos que habían corrido la misma horrible suerte. Quiero poneros en antecedentes para aclarar que no la violaron, ¿ok? Cuando leo algo de que "a tal chica su mundo se le hizo pedazos a tal edad" normalmente tiendo a pensar que la han violado y eso me quita bastante las ganas de leer, lo mismo que si dicen claramente que ha sido así. Pero a Summer no la violaron. La secuestró un depravado y en ese sótano sucedieron cosas espantosas, pero Summer no fue violada por él. No sé si habrá alguien a quien las violaciones también le echen atrás, pero si es así, bueno, pues ya sabes que este libro está libre de violaciones. Lo que no quita que no haya drama, porque lo hay, y mucho. Ya solo de pensar en unos pobres niños secuestrados durante varios meses y todo lo que les obligaba a hacer, se me ponen los pelos de punta. Niños. Eran niños. 
Por otro lado, Logan es un joven universitario que en su adolescencia ha tenido problemas muy serios con el alcohol y las drogas. Serios hasta el punto de intentar suicidarse. Ha pasado por una clínica de desintoxicación, por una rehabilitación, y al comienzo de la historia se siente muy orgulloso de decir que lleva dos años sin probar una gota de alcohol ni drogas. Su historia puede parecer más simple que la de Summer, pero os aseguro que no. Adora a sus padres y el verlos sufrir le consume por dentro, porque es sabedor de que ese sufrimiento lo provoca él. 
Logan y Summer se conocerán en la universidad. Se gustarán. Y se enamorarán. Ambos irán abriéndose poquito a poco el uno al otro, irán eliminando los muros que ellos mismos han construido para protegerse. Como lectora, notaba cada pequeño paso que daban. Percibía lo que les costaba, lo que les dolía su pasado, sus fantasmas que parecía que nunca se iban a ir. Y sufría junto con ellos. Me alegraba cuando el pequeño paso que daban era exitoso. Ahí es donde yo notaba lo bien escrita que está esta novela.
La primera mitad está narrada en primera persona por Summer, La conoceremos  tan bien que notaremos lo rota y desgarrada que está por lo que le sucedió de niña y el efecto tan positivo que hace Logan en ella. Y la segunda mitad está narrada por Logan. ¡Ojo! No es la misma historia bajo dos puntos de vista. Ambas partes están separadas por un hecho que no puedo revelar porque sería un spoiler gigantesco, pero a partir de ahí a quien seguimos es a Logan en su afán de encontrarse a sí mismo. Y, al igual que hicimos en la primera parte con Summer, esta vez vamos a meternos en la piel de Logan. Como os dije, lo suyo es también muy fuerte. No solo son los fantasmas del alcohol y las drogas. Hay más. Mucho más. Inciso: tampoco fue violado, eh, no vayáis a pensar algo así. 
El final es una auténtica maravilla, con una narración dulce y preciosa, que es el broche de oro a esta historia tan dura pero a la vez tan bella. ¿Es un spoiler decir que es un final feliz? Para mí no, creo firmemente que Summer y Logan no merecían otra cosa. Es un final lógico y si no fuera feliz sería totalmente injusto para ellos y para los lectores. 
Conclusión: Es una historia dura, muy dura, con mucho drama, pero tratado con mucho tacto y sin caer en el exceso o en lo absurdo. Dos ejemplos de superación personal, y de que, después de todo, la felicidad plena está en cada uno de nosotros. Tal vez necesitemos a otra persona que nos ayude a encontrarla, pero debemos ser nosotros quienes la alcancemos. 

Bellotómetro:

5/5 bellotas. Precioso, muy duro pero maravilloso. 

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