jueves, 27 de diciembre de 2018

Ranking literario: lo mejor y lo peor de 2018

¡Hola, bellotitas! Está acabando el año y no puede faltar esta entrada. Como siempre, traigo una lista de mi top 10 de mejores lecturas, de las peores, y de las abandonadas: Comencemos:

Las peores lecturas del año:
Pufff, la calidad de estos libros me estalló como una bola de nieve en toda la cara.



Estos tres son de romántica adulta. El fuego que nos une tiene como protagonista a un yonki que me sacó de mis casillas y a una chica tan tan tan pero taaaaan buena que le perdona hasta lo imperdonable. Como el hielo me resultó bastante cliché y sin nada destacable, y Gus fue una total decepción comparado a su primera parte. Sus protagonistas no me decían nada de nada. 

Un New Adult y tres más de romántica adulta. 13 horas en Viena me pareció insulso, sin chicha, y me aburrió bastante. El corazón escondido fue un folletín romántico más, sin nada que destacar, y su secuela, Sombra y estrella, una paranoia tras otra, sin sentido. Edenbrooke parecía muy bonita pero a sus protagonistas -a ambos- me dieron ganas de abofetearlos. 


Pasamos a los juveniles. La llama en la niebla, una historia que pretende ser Mulan y no se queda ni en el intento, La Bella y la bestia es un insulto al cuento original y Sin corazón una historia que podría haber estado un poco mejor llevada para que no fuera tan trágica. 

Los abandonados:
Pues no, Bella, lo siento, los que vienen ahora los abandoné porque no pude con ellos. 


El beso del traidor lo empecé porque esperaba algo de romance y fantasía y resultó ser espionaje, y con un montón de personajes y apodos. Lo dejé porque me perdía. Stealing Snow es que no tenía ni chicha, la narrativa era insulsa y no tenía nada del cuento original de La reina de las nieves. Los jóvenes de la élite lo cogí con mucha ilusión porque la autora me encantó en su trilogía Legend, pero joooope qué rollazo. Parecían los X.Men en el carnaval de Venecia. 

Cazados fue otro retelling de Bella y Bestia... porque lo han promocionado así, y porque ellos lo dicen, porque ni esa es mi Bella ni ese es mi Bestia. La esencia de los personajes está totalmente cambiada, y cuando Bestia empezó a extorsionar a Bella cerré el libro para no volver a abrirlo. El lamento de los abedules es que simplemente me aburrió, demasiada descripción, demasiados saltos entre escenas, los personajes no me transmitían nada...

Y ahora sí, vamos a los buenos:
Ooooh, isn't it amazing?


El puesto 10 estaría El corazón de la Banshee. Esta obra de Raquel de la Morena está muy bien ambientada y tiene unos muy buenos protagonistas con una preciosa historia de amor que nos lleva a Escocia. El el puesto 9 Estarían ambas: Ross Poldark y Demelza. La narrativa de Winston Graham es muy buena y la historia lo merece. En el puesto 8 estaría este precioso retelling moderno y friki de la Cenicienta: Cinder y Ella

En el puesto 7 está esta preciosa novela epistolar ambientada en Escocia con una preciosa historia de amor, Cartas desde la isla de Skye. En el puesto 6 mi descubrimiento en cuando a la romántica adulta: Flores en la tormenta. Es tan, pero tan bonito... Y en el puesto 5 la genial Amy Harmon con una obra ambientada en la Segunda Guerra Mundial. La frágil belleza del cristal nos narra la historia de amor entre un cura católico y una joven judía. 

Y el top 4 ha sido realmente difícil porque cualquiera de ellos se merece el primer puesto, pero los he ordenado como he podido: En el 4 Siega, esta nueva obra de Neal Shusterman, brutal como solo él sabe. En el 3, Everless, preciosa historia de fantasía con el tiempo como moneda de cambio. La chica que dejaste atrás, esta vez la Primera Guerra Mundial y un cuadro que cambiará los destinos de las dos protagonistas con casi 100 años entre una y otra. Y en el puesto de honor está Nuncanoche. Esta obra de fantasía oscura es brutal. No sé qué es mejor: su protagonista, su historia impredecible, sus personajes, las notas del autor al pie de página... 

Y hasta aquí el ranking con lo mejor y lo peor del año. ¿Coincidimos en alguna? ¡Contadme! ¡Un besito!

jueves, 20 de diciembre de 2018

Cinder y Ella: Felices para siempre, de Kelly Oram

¡Hola, bellotitas! Ya casi es Navidad, y para estas fechas no hubiera podido encontrar un libro mejor que este:



Muchas gracias a Oz editorial por el envío del ejemplar para la reseña ^_~

Reseña:  Cinder y Ella (La primera parte de esta bilogía) era un retelling del cuento de Cenicienta, donde él era una estrella de cine y ella una chica latina que sufrió un accidente que le dejó graves secuelas. En esta segunda parte veremos qué ocurrió después de aquella premiere donde Ella venció sus temores y apareció públicamente como la pareja de Brian Oliver "Cinder". 
Este libro trata sobre la necesidad de vencer los miedos que cada uno tenemos. Aunque Ella está convencida de que Brian la quiere muchísimo, su cuerpo lleno de cicatrices y su temor a que él lo vea es algo que, de alguna manera, se interpone entre ambos, aunque Brian no tiene ningún problema con ello. A lo largo de las páginas del libro Ella se reconciliará con su cuerpo y encontrará personas que le enseñarán que no debe sentirse avergonzada ni odiar sus cicatrices o deformidades. Ese es el punto central del libro, pero también tiene un mensaje sobre lo que representa la familia. Ella tiene problemas con su padre, ya que no le perdona que la abandonara y que nunca fuera una prioridad para él, y en lugar de ser su orgullo sea su error, o la consecuencia de este. El padre intenta hacer todo lo que puede por integrar a Ella en su familia y por integrarse él mismo en la vida de Ella, pero las relaciones entre familiares no son siempre fáciles, y en el caso de Ella, con las circunstancias en las que ha crecido, menos aún. 


Pero el libro no solamente tiene los mensajes de arriba. La relación entre ambos es muy divertida, porque Brian sigue siendo el típico chaval que va de chulito pero que en realidad es un pedazo de pan. Sigue siendo el mismo que conocimos, y eso desemboca en unos diálogos cargados de chispa y humor. Aunque no todo es felicidad, porque la fama de Cinder es algo que Ella debe sobrellevar, y más al haber entrado tan de repente y tener a toda la prensa amarilla queriendo llevarse el cotilleo más jugoso. Esto le costará a Ella más de un disgusto, pero al mismo tiempo la hará más fuerte y ayudará a que aclare un poco sus ideas. 
Si os gustó Cinder y Ella, os gustará esta segunda parte. A mí me ha gustado mucho; no tanto como la primera, pero es una buena continuación donde vemos cómo siguen los protagonistas de este cuento de hadas moderno. Cinder y Ella siguen siendo una pareja tan mona y adorable que te dan ganas de achucharlos a los dos. La evolución de Ella es magnífica, la ves cómo va venciendo sus miedos poco a poco y se convierte en una joven segura de sí misma y dispuesta a decidir por sí misma y no lo que otros quieren. 
Los personajes son los que ya conocemos: Cinder, Ella, las hermanastras Ana y Juliette, ambas con papel, su padre y la madrastra, y se incorporan los padres de él, por separado ya que están divorciados, y el fotógrafo Nash, quien tiene un papel pequeño pero importante. Todos ellos harán que la entrada de Ella al mundillo del famoseo sea una experiencia (y para nosotras, una lectura) inolvidable.

Bellotómetro: 

4/5 bellotas. Una muy buena continuación, en la linea del primer libro. 

jueves, 13 de diciembre de 2018

El último llanto de los delfines, de Estefanía Yepes

¡Hola, bellotitas! Ya no queda nada para que acabe el año. Me he propuesto acabarlo sin lecturas de editorial pendientes, y aquí traigo esta que me lo acabo de terminar:


¿Por qué quise leer este libro? Porque el argumento pintaba muy original. Una chica que es correctora de novelas y que pasa a ser contratada por una prestigiosa editorial americana, pero que pronto descubrirá que no era lo que ella esperaba. Me daba curiosidad eso de los entresijos de una editorial, y si además hay historia de amor, ¿por qué no?, me dije. Me sorprendió mucho que este modesto blog fuera uno de los elegidos para reseñarla, así que aprovecho para decir: 
Gracias, Ediciones Urano, por el envío del ejemplar 
^_^
Reseña: El libro se nos presenta narrado en primera persona por Haley, una chica malagueña que dedica su tiempo a corregir manuscritos. Nos presentan a Adriana, su mejor amiga, y a Toni, su novio. En esto que le llega una oportunidad para trabajar de correctora en una editorial americana muy prestigiosa, un gigante editorial (como Penguin Random House, por ejemplo). Para ello tiene que mudarse a Nueva York. Una vez allí, conocerá al hijo del matrimonio al que le ha alquilado una habitación, Owen, y en el trabajo, descubrirá que no todo es tan bonito e idílico como en principio pensó que sería. La autora escribe muy bien, la prosa es muy fluida y entretenida. No te aburre, pero me sobraba una cosilla de nada que comentaré más abajo.
Los personajes son pocos (como a mí me gusta) y eso hace que estén muy bien perfilados. Haley, Owen y Adriana son los principales y no tengo nada negativo que decir de ellos. Haley y Adriana se complementan a la perfección, sientes su amistad, y yo quiero una amiga como esa. No son perfectas, claro que no, pero eso es lo que las hace aún más creíbles. Owen es un hombre que... bueno, es un hombre. No es el chico malote estereotipado (¡gracias!), pero tiene su carácter bien definido y acabas encariñándote con él y con ese punto chulito que tiene. Luego está Thelma, la madre de Owen y casera de Haley, muy amable, cariñosa y maternal, y Lucy, compañera de Haley. Todas tienen su papel y lo desempeñan más que bien. 
No sé si las editoriales, tanto españolas como americanas, trabajarán así, pero me ha parecido apasionante todo el entresijo que la autora nos muestra. Del mismo modo, la ambientación en Nueva York es magistral, realmente me he sentido transportada a la Gran Manzana y, más tarde, a la Riviera Maya. Y ya que hablamos de descripciones, cada vez que Haley describe cómo se siente frente a algún varapalo, o en lo que concierne a Owen, o cómo echa de menos su vida en España, está fabulosamente narrado. Llegas a sentir con ella todo por lo que está pasando.
Y luego está esa pequeña denuncia acerca de los ghostwriters o, como los llamamos en España, los negros literarios. Es decir, todos aquellos que hacen la parte díficil del oficio de escritor mientras que el famosete de turno se lleva la gloria por nada. Escribir una novela no es fácil. Hay que planear una estructura, tramas, subtramas, personajes que hay que perfilar, diálogos, ritmo, sintaxis, ortografía, gramática... No, no es nada sencillo (Yo tardé un año en escribir cada uno de los volúmenes de mi trilogía, con eso os lo digo todo), no puede quedar ni un cabo suelto, no puede haber errores, tiene que estar perfecto. ¿Todo para qué? Para que al negro literario le paguen una ínfima parte y el famosete se lleve toda la millonada que generarán las ventas, además de toda la gloria y de las felicitaciones que no merece. La trama central del libro gira en torno a este tema. 
Y el final. ¡Vaya final! Me ha gustado mucho y ha hecho que se me quedara la sonrisa al cerrar el libro. Creo que la historia no podría acabar mejor, así que, enhorabuena, Estefanía, te ha quedado una obra preciosa. Quizás me sobraban esos (pocos) capítulitos con la historia que estaba corrigiendo Haley, es la única pega que le pondría. 

Bellotómetro:

4/5 bellotas. ¡Muy buen libro!

lunes, 3 de diciembre de 2018

La Bella y la Bestia: un giro inesperado, de Liz Braswell

¡Hola, bellotitas! En nada acabamos el año. ¡Ha pasado rapidísimo! ¿Habéis leído mucho? ¿Habéis descubierto autores nuevos? ¿O libros que habéis querido tirar por la ventana? Alguno de esos he tenido yo también...


¿Por qué quise leer este libro? Porque La Bella y la Bestia es uno de mis cuentos favoritos, y este en concreto llevaba el sello Disney, con lo cual imaginé que estarían esos personajes adorables y que la historia sería, pues... distinta a lo que ha resultado ser ^^U

Reseña: (Aviso que contiene algunos spoilers)


Pues sí. Esta podría decirse que ha sido mi cara cuando cerré el libro. Porque, una vez más, la palabra ha sido DECEPCIÓN. Pensaba que, al tener el sello Disney, sería distinto. Que no me encontraría una Bella a la que le mola perderse por el bosque a cazar, a un padre obsesionado con la bestia o a una bestia malvada y chantajista (cofcofcazadoscofcof). Aquí tenemos a esa Bella a la que le encanta leer, en ese pueblo en el que nunca pasa nada y con unos vecinos para quienes ella es la rarita; a su padre inventor un pelín chiflado; a Gastón, ese cazador con mucho músculo y poco cerebro; a Lumiere, Dindon, la señora Potts... a todos los que amamos los que hemos visto la peli de Disney. 
Además, la historia se entrelaza con una en el pasado que cuenta cómo Maurice (el padre de Bella) conoció a la que sería su mujer y madre de su hija. Una historia muy bonita, todo sea dicho. Desde el principio se van alternando ambas historias, la de Rosalinde (madre de Bella) con la de Bella. Esta última empieza como la peli, con ese paseo por el pueblo donde Bella visita la librería y va saludando a todos sus vecinos mientras ellos murmuran que es una chica muy rara. 


La historia de Rosalind y Maurice me ha parecido preciosa. En ella, vamos a ver que las rosas tienen mucha importancia, y entonces me venía a la mente la rosa que la bestia guardaba en el ala oeste. Los vemos enamorarse, casarse... Es preciosa esa parte. 
Rosalind es una charmante, es decir, un ser con magia. Y en el pueblo, este tipo de seres no están bien vistos. No solo hechiceras y magos, sino también criaturas como las hadas, los faunos, etc. Los reyes no hacen nada por detener a aquellos que los odian ni para investigar las misteriosas desapariciones, y es después de muchas complicaciones y bastantes infortunios cuando Rosalind lanza un hechizo sobre el castillo, que convierte al joven príncipe en una bestia y a los sirvientes en objetos. 
Y también, como los capítulos de los dos hilos narrativos se alternan, es cuando sucede la escena que va a marcar el final del parecido con la película de dibujos:


Tras esto, ya nada será igual. Porque, al tocar la rosa, esta se destruye y con ello la bestia y los demás quedan condenados de por vida. Por otro lado, Bella tiene una visión y en ese momento sabe que la hechicera es su madre, a la que no ha visto desde que era un bebé. A partir de ahí, intentarán encontrar una salida para dar con su madre y que sea ella la que deshaga el hechizo. 

Desde ese momento, el libro se me hizo cuesta arriba. Bella y la bestia dan muchos palos de ciego, para que encuentren algo que realmente les sirva dan miles y miles de vueltas. Ya nada es como en la peli. Y cuando digo nada, es NADA. 

Esta maravillosa escena NO ESTÁ.

ESTA TAMPOCO. 

Y, aunque parezca mentira, este NO ES EL MALO. 
Simplemente es un cabeza hueca. 

Toda la trama sucede en unos 3 días, más o menos. Y en tres días... ¿Puede una pareja enamorarse? Bueno, depende de a quién le preguntemos (Aladdin y Jasmine sí que fueron rápidos en ese sentido), pero, desde luego, a Bella y a la bestia les costó bastante más. En la película fueron como unos 6 meses los que pasó encerrada en el castillo (se nota si veis que al empezar es otoño, después hay nieve y cuando acaba llega la primavera). Entonces... ¿Instalove? Pues, eh... no, amigos, entre Bella y la bestia no hay instalove. Ni instalove, ni ningún tipo de love. 

OLVÍDATE DE ESTO. 

La bestia se supone que era un tipo consentido, con mucho genio, que no sabía controlarse, egoísta... etc etc. Y que, gracias a Bella, aprende y cambia. Esta bestia, pues... gruñe, también tiene mal humor, pero desde luego que no pega un cambio brutal que enamora a Bella. En los tres días que pasa, aprende un poco a controlar su genio. Punto. 
Y lo puse en el gif más arriba, pero... ¡Gastón no es el malo! Increíble, pero cierto. Sale, sí, y también sale Le Fou, y las trillizas rubias (con nombre y todo!), pero su parecido con el de la peli acaba cuando acaba esta escena:

El malo de esta historia no es Gastón, de hecho, él incluso hace algo bien (no diré qué). No os revelaré quién es el malo, casi mejor que lo descubráis por vosotros mismos, pero desde el momento en el que se revela, la historia toma unos tintes que a mí se me hicieron desagradables. De hecho, no sé cómo Disney dio el visto bueno y puso su sello a este argumento, porque la parte final ya no solo es que no se parece para nada a la de la película, sino que es bastante perturbadora. Al menos, para mi gusto.

Ni qué decir tiene que no me ha gustado. Me ha gustado ver a la señora Potts, Lumiere, Dindón, Chip y el resto, que son tan adorables como en la peli (casi todos, al menos durante la primera mitad). Me ha gustado leer la historia de amor de Maurice y Rosalind, que es muy bonita. Y el famoso giro, que lo anuncian ya en la portada, no me molestaba, pero sí lo que deriva de él, que convierte la historia en algo totalmente diferente a como yo lo conocía. Por no hablar del final. Por favor, el final... Si ya que no se enamoraran me pareció una patada suprema a la historia, hay otro detalle más que no sucede (shhh) y que me dio bastante rabia. 

Si sois fans de la película de Disney, ya sea de la animada o la de Emma Watson, huid de este libro. Quedaos con el argumento y los personajes tal y como los conocéis, porque, aunque este libro lleve el sello Disney, no es para niños ni para fans de la peli. 


Bellotómetro:

2/5 bellotas. El principio bien, pero el medio es aburrido y el final desagradable. 

martes, 27 de noviembre de 2018

Casi imposible, de Nicole Williams

¡Hola, bellotitas!
Dentro de poco se nos acaba el año. Y nada mejor que acabarlo con unas cuantas lecturas de esas que te hacen quedarte con una sonrisa, como esta:


Sinopsis: Cuando Jade decidió pasar el verano en California con su tía, creía saber dónde se estaba metiendo. Pero nada podría haberla preparado para Quentin. Nunca ha vivido mucho tiempo en suburbios, y aun así Jade sabe que su irritante (e irritantemente mono) vecino implica P-R-O-B-L-E-M-A-S. Por su parte, cuando Quentin descubre que Jade tiene la intención de pasar el verano en casa leyendo libros, organiza otros planes. Salir a hurtadillas, quedarse despiertos hasta tarde o incluso nadar a medianoche; Quentin se ha propuesto ofrecerle a Jade días —y noches— para recordar.
Pero a pesar de sus perfectos encuentros, cada vez que Jade intenta acercarse, Quentin se aleja. Está claro que guarda un secreto, y Jade está decidida a descubrirlo.

Reseña: ¡Qué libro tan bonito! Me ha sacado de una apatía lectora que tenía últimamente, y eso ya es mucho, no todos los libros pueden decir eso. Lo primero que he de decir es que este libro te lo lees sin apenas darte cuenta; empiezas y las páginas se pasan solas. La pluma de la escritora es muy, muy amena y entretenida. La historia se nos presenta narrada en primera persona por Jade, nuestra joven protagonista. Ella ha pasado toda la vida viajando de un lado para otro con su madre, que toca en un grupo musical, pero este verano está dispuesto a pasarlo como una chica estadounidense normal. Y, de paso, conocer a su padre biológico, al que le ha seguido la pista. El muy... capullo abandonó a su madre en cuanto se enteró de su embarazo, pero Jade quiere conocerle. 

Respecto a los personajes, están todos muy bien definidos. No hay muchos, como a mí me gusta, por lo que no hay riesgo de perderse entre decenas de nombres. Jade es nuestra protagonista y es una chica que parece tener las ideas claras, pero que iremos viendo que no tanto como ella cree. El contrapunto lo pone Quentin, su vecino, guapo y muy majo. Al principio tendrán un encontronazo bastante desagradable, pero luego veremos que es un pedazo de pan. El resto son secundarios: los tíos de Jade, la madre, algunas chicas conocidas de Quentin... De entre todos ellos, destaco a la madre de Jade. Es maravillosa, una madre buenísima que sabe bien lo que necesita su hija en cada momento. 

El libro gira en torno a Jade y Quentin, pero a medida que avanzamos, vemos que hay una tal Blaire de la que nadie quiere hablar y que formó parte de la vida de Quentin. Es un secreto que da pie al colofón del libro (y que no pienso desvelar). Yo no me lo vi venir y me gustó mucho que metieran ese punto adulto en un libro que a priori parecía 100% adolescente. Respecto a Jade, la veremos evolucionar a lo largo de ese verano. Conocer a su padre marcará un antes y un después en su vida, y mi conclusión es que, por mucho que le duela, se parece a él un poco en su forma de ser. Pero, por fortuna, la mitad de sus genes son de su estupendísima madre. Jade aprenderá a aceptar a las personas tal y como son y a no huir o salir corriendo cuando las cosas se complican.


Romance juvenil, tardes de sol, risas... Todo eso os espera en este libro. Está muy en la linea de los de Stephanie Perkins o Kasie West; si os gustan estas autoras, os gustará este libro. Es dulce y ameno. No esperéis ningún giro asombroso o increíble, porque la hsitoria es simple, pero precisamente en su simplicidad está su belleza. Una trama más enrevesada lo hubiera estropeado. A mí me sacó de una apatía lectora  y me dejó con una sonrisa en la cara, así que lo recomiendo mucho si buscáis un libro bonito y sin complicaciones. 

Bellotómetro: 

4/5 bellotas. Muy bonito. 

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