miércoles, 26 de septiembre de 2018

Gus, la otra mitad del corazón, de Kim Holden

¡Hola, bellotitas! Siguiendo con la mala racha de lecturas veraniegas de las cuales casi ninguna me emocionó, hoy traigo esta. La tenía pendiente desde hacía medio año, pero por fin me pude poner con ella, y... otra decepción. ¡Qué malo es ir con las expectativas altas! Porque luego te llevas un porrazo de aúpa...


Gus, la otra mitad del corazón es la segunda parte de Bright Side, el secreto está en el corazón


¿Por qué quise leer este libro? Obvio: porque leí la primera parte y me encantó. A pesar de que el primero acababa bastante cerrado, estaba deseando saber cómo continuaban los personajes. Me había encariñado mucho con ellos. 

Reseña: Si habéis leído Bright Side, probablemente llorasteis mucho con ese final. Porque vaya final. Aunque se veía venir desde la mitad, no por eso dejaba de ser trágico y muy triste. Todos los personajes se quedaron destrozados ya que Kate, o Bright Side, como la llamaba Gus, era una persona increíble, una luz que iluminaba las vidas de todos. El que peor lo lleva es Gus, en quien está centrado este libro. No lo ha superado, pero al mismo tiempo su grupo se está haciendo más y más famoso. Tiene que sobrellevar el dolor con una gira por Europa que no quiere hacer. Solo desea estar a lo suyo y ahogar sus penas en alcohol y drogas. No quiere sentir, no quiere recordar que Bright Side no volverá. Empieza a dejarse, hasta el punto de no asearse y permanecer con la misma ropa semanas seguidas. En la gira, a la que va obligado, sale al escenario completamente colocado porque es la única manera que conoce de hacerlo. Y en esas anda cuando conoce a Scott, una asistente del grupo que les acompaña durante la gira. Al principio se caen fatal. Pero poco a poco se van conociendo mejor y surge el amor. Básicamente, ese es el resumen del libro y lo que podemos leer en la contraportada. 


Pues... no me ha gustado. Sí que he reconocido la pluma de Kim Holden, y esa pluma es la que me ha hecho continuar y no dejarlo abandonado. Kim escribe muy bien, pero este libro está a años luz de su predecesor. Bright Side era desgarrador, te tocaba el alma y luego te la hacía añicos sin piedad. No es el caso de esta segunda parte. La autora trata de que nos pongamos en el lugar de Gus o de Scott (que van alternándose los capítulos) y sintamos como ellos, pero no lo logra. Sí, está claro que Gus está destrozado por la pérdida, pero eso lo sabemos ya de antemano. Todas sus acciones, al menos a mí, no me han sorprendido. ¿Una estrella del rock que se autodestruye? ¿Una persona que se deja completamente porque ha perdido a la persona más importante de su vida? Eso es lo que nos cuenta, pero sin llegar a transmitir como lo hizo en la primera parte. 
En el fondo, yo creo que la primera parte logró llegarme tanto porque no me puse en el lugar de la protagonista, sino en el de tantas personas a las que les cambió la vida y por eso me destrozó tanto. En este libro no conocemos a los seres que quieren a Gus, al menos no tanto como para que compartamos su preocupación y su dolor. Están los otros miembros del grupo y está su madre, pero apenas se incide en la relación que tienen. 


¿Y qué decir de Scott? La chica es sosa y no tiene nada que me hiciera destacarla. También tiene una losa con la que cargar, sus propios problemas, que se solucionan en un plis plas y sin mayor dificultad (¿En serio ha sido tan fácil?, pensaba yo). Además de que se me hizo muy irreal su relación, porque Gus pasa de estar entre drogas y alcohol a cortar drásticamente con todo eso sin que le costara nada, y la ayuda a encontrar trabajo nada menos que en casa de su madre, cuando apenas la conoce mucho. Es como si fueran dos Gus diferentes: el de la gira y el post-gira. ¿Y eso que le da de ayudar a la gente? En Kate se entendía, pero en Gus no me pega nada. 
Huelga decir que si seguí leyendo es porque la narración era muy entretenida, pero la historia no me ha gustado nada. Toda la parte romántica me ha parecido muy forzada y el personaje de Gus de la primera mitad no tenía nada que ver con el de la segunda. 

Bellotómetro:

2/5 bellotas. Un ejemplo de lo de "segundas partes nunca fueron buenas".

3 comentarios:

  1. Holaa
    El de Bright Side no estivo mal pero a mi me aburrió mucho, por eso no tengo ninguna intención de leer este jaja
    A ver si la próxima lectura es mejor <3
    Un besito

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  2. Estos no me llaman nada, la verdad...
    :3

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  3. ¡Hola! Vaya, que pena que esta segunda parte no haya sido de tu agrado. Yo la amé casi tanto como la primera parte. Me pareció una historia bonita y tomada con calma.

    ¡Besos!

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¡Comenta, bellotita! Me hará mucha ilusión *^__^*

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